jueves, marzo 19, 2020

ESPIRITUALIDAD Y SALUD EN TIEMPOS DEL CORONAVIRUS (Sergio Fritz)









La actual pandemia del coronavirus, ha puesto en la conversación recurrente una serie de asuntos; siendo el más visible, el relativo a la propia salud.

Pero, antes de avanzar, preguntémonos lo siguiente....

 ¿QUÉ SE ENTIENDE POR SALUD?

«La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades». La cita procede del Preámbulo de la Constitución de la Organización Mundial de la Salud, que fue adoptada por la Conferencia Sanitaria Internacional, celebrada en Nueva York del 19 de junio al 22 de julio de 1946, firmada el 22 de julio de 1946 por los representantes de 61 Estados (Official Records of the World Health Organization, Nº 2, p. 100), y entró en vigor el 7 de abril de 1948. La definición no ha sido modificada desde 1948. (ver aquí)

Uno quisiera que se incluyera en ese bienestar lo espiritual. Pero, obviamente, la O.M.S. habría estimado que aquello es demasiado plástico y dificil de conceptuar, y que por otro lado generaría problemas entre los países, pues muchos gobiernos al ser laicos no aceptan visiones del tipo religioso, con lo cual se suele asociar lo espiritual, aunque a nuestro juicio ello puede ser incluso independiente de las religiones formales.





Ese bienestar querido por la O.M.S. también ha sido anhelado por los participantes de las diferentes tradiciones espirituales, e incluso  muchos de ellos han dado ciertas herramientas para el logro de aquello. Incluso lo que podríamos llamar ´´conocimiento popular´´, seguido por la gente de esos caminos,  nos puede ayudar.

A continuación daremos dos prácticas venidas de gente vinculada a la espiritualidad como a las enseñanzas dadas por ciertas sendas de autoconocimiento y que tienden a mantener un buen sistema defensivo de salud.

Veamos entonces dos técnicas que pueden ayudarnos en cualquier tiempo a mejorar nuestra salud, entendida esta como un sistema integral.


LA MEDITACIÓN







Es uno de los métodos espirituales más extendidos. Hay formas de meditación no solo yóguicas, sino budistas, taoistas, etc. También se utiliza en el Cuarto Camino (las enseñanzas que trajo Gurdjieff a Occidente) y en otras sendas modernas. 

La meditación busca un estado de apercepción de sí mismo y el experimentar la Unidad. Pero además de tan nobles fines, posee beneficios quizás más alcanzables para muchos. Entre ellos: la calma, la mejor atención, la relajación muscular, disminuye el ritmo cardiaco, baja la ansiedad y faculta el desestresarse.

Ayuda a otorgar ´´cambios en la secreción y liberación de varias hormonas pituitarias que mimetizan los efectos del neurotransmisor inhibitorio GABA, los niveles de cortisol se reducen significativamente, el nivel de proteínas séricas se incrementa y las presiones sistólica y diastólica y la frecuencia del pulso disminuyen, al igual que la capacidad vital respiratoria y la ventilación voluntaria máxima. También está asociada con un incremento de los niveles de melatonina y de la hormona liberadora de la corticotropina (HLC)´´ (ver más info aquí). 

Incluso habría notorios cambios en el metabolismo de quienes meditan (ver más info aquí)



EL AYUNO



Existen varios tipos de ayunos. Desde uno voluntario a uno forzado; desde uno total a uno relativo; desde uno de un día a uno de meses; etc.

Las distintas tradiciones espirituales suelen utilizarlo. Para el periodo de Cuaresma lo prescribía el cristianismo, para el Ramadhan el mundo islámico, para lograr mejor los efectos del Yoga los hindúes, etc. 

Hoy suele usarse mucho en contextos modernos el ayuno terapéutico. Este consiste en la abstención de alimentos, permitiéndose y prescribiéndose líquidos como agua, zumo de frutas, y también de ciertas sales (por ejemplo, la que hay en el agua bicarbonatada). Debe ser vigilado por un terapeuta.

Desde un punto de vista físico, el ayuno tiene una serie de beneficios para el ser humano: 

disminuye el volumen circulatorio
- reduce la obesidad
- baja la tensión emocional
- ayuda en los casos de alteraciones cardiacas
- es regulador de la poliglobulia
- etc.

´´Los beneficios de un ayuno terapéutico bien llevado y controlado no se limitan exclusivamente al ámbito de la salud. Se trata de un procedimiento simple y barato, que podría ahorrar mucho dinero público en camas de hospital y en tratamientos médicos más o menos costosos. El doctor Pablo Saz asegura que “se gasta mucho dinero en algunas de las enfermedades que se resolverían con el ayuno de manera económica. Michalsen, uno de los mayores investigadores del ayuno, dice que si las enfermedades que él resuelve con el ayuno las curase un solo medicamento, sería multimillonario. Porque tendría una publicidad asombrosa y unas ganancias enormes. El problema es que el ayuno no es una patente de la industria farmacéutica”.
(Pablo Saz Peiró, doctor en Medicina y Cirugía por la Universidad de Zaragoza y especialista en Hidrología y Climatología Médicas por la Universidad Complutense de Madrid)


Además, de lo anterior el ayuno brinda una ayuda espiritual y mental en el el ejercicio de la voluntad, la obtención de paciencia, serenidad y dominio de sí.


Lo fundamental en el caso del ayuno es tomarlo de manera seria, responsable y al menos mientras no tengamos la práctica y el conocimiento adecuado recurrir al apoyo de un terapeuta o médico. Debiera ir siempre acompañado de agua y otros líquidos,  y ser gradual y moderado, mientras el organismo se acostumbra.

C O N C L U S I O N E S 

Aun cuando el objetivo central de los caminos espirituales dicen relación con la Realización Espiritual, no es menos cierto que para lograr aquello otorgan medios útiles para crear las condiciones necesarias. Y entre ellos los dos que acabamos de mencionar.

No hemos querido saturar este artículo con información, sino ir a lo central, ya que los momentos graves de pandemia que vivimos, requieren algo que sea de fácil y rápida lectura. En ocasiones como la presente, es aún más imprescindible volver a lo simple.
























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